Las autoridades militares de Israel confirmaron el miércoles la intercepción de un misil proveniente de Yemen, según informaron tras las activaciones de alertas en diversas regiones del país. Los hutíes, en respuesta a un reciente ataque aéreo en Saná que resultó en la muerte de varios líderes importantes del grupo, han admitido ser los autores de este intento de ataque.
«Tras las alertas activadas en varias partes del país, ha sido interceptado un misil lanzado desde Yemen», indicó el ejército en una declaración oficial, agregando que las alertas se activaron conforme a las normativas establecidas.
Por otro lado, Yahya Sari, vocero militar de los hutíes, declaró que han ejecutado una operación «cualitativa» dirigida a «objetivos enemigos sensibles» en Tel Aviv, lanzando «dos misiles balísticos» hacia Israel. «La operación ha logrado exitosamente sus objetivos, gracias a Dios, y ha provocado que millones de sionistas usurpadores corrieran a sus refugios y la suspensión de las operaciones aeroportuarias», expresó en un comunicado, en que que ha resaltado que se trata de una respuesta al «genocidio» de Israel contra la Franja de Gaza y su reciente bombardeo contra Saná.
Sari también enfatizó que «el enemigo israelí no disfrutará de seguridad y estabilidad» y anunció que los ataques contra Israel «continuarán a un ritmo crecientes durante el próximo periodo», según lo reportado por la agencia de noticias SABA, asociada a los hutíes.
Este incidente sucede un día después de que los hutíes reclamaran responsabilidad por ataques con drones a Israel y un asalto a un barco en el mar Rojo. El grupo también confirmó la muerte de Ahmed Ghaleb al Rahwi, primer ministro ‘de facto’ de los hutíes, y otros once altos cargos, incluidos nueve ministros, en un ataque previo por parte de Israel.
Desde 2015, los hutíes han mantenido el control sobre Saná y otras áreas del norte y occidente de Yemen, y han intensificado sus ataques contra Israel y embarcaciones vinculadas a este país desde el inicio de una ofensiva en Gaza después de los ataques del 7 de octubre por parte de Hamás y otras facciones palestinas.