Ampliación | Israel ataca el Palacio Presidencial en Yemen como represalia tras un misil con bomba de racimo

Archivo - Imagen de archivo de un ataque israelí contra la capital de Yemen, Saná, en abril de 2025 Europa Press/Contacto/Mohammed Mohammed - Archivo

La fuerza aérea de Israel ha llevado a cabo la destrucción del Palacio Presidencial en Saná, capital de Yemen, como parte de una serie de bombardeos en respuesta a un ataque con un misil de bomba de racimo hacia su territorio. En estos ataques, se reporta la muerte de al menos dos individuos y 35 heridos, afectando también dos plantas de energía y un depósito de combustible.

Desde Tel Aviv, el ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, en presencia del primer ministro Benjamin Netanyahu, confirmó que «ha destruido el palaco presidencial hutí en Yemen». Netanyahu, por su parte, ha asegurado que «atacaremos a quien nos ataque» y enfatizó en la determinación de Israel ante estos conflictos, según informa ‘The Times of Israel’.

«El régimen terrorista hutí está aprendiendo por las malas que pagará, que está pagando un precio muy alto por su agresión contra Israel», complementó Netanyahu. Katz agregó que se mantiene un bloqueo aéreo y naval y que «Por cada misil que disparen contra Israel, los hutíes lo pagarán multiplicado».

El ejército de Israel confirmó los objetivos del ataque, incluyendo el complejo militar del Palacio Presidencial, las centrales de Haziz y Assar, y un almacén de combustible. «Los ataques se llevaron a cabo en respuesta a repetidos ataques del régimen terrorista hutí contra el Estado de Israel y sus ciudadanos», explicaron.

Según fuentes israelíes, el ataque con la bomba de racimo ocurrió el viernes, impactando una casa en Ginaton sin dejar víctimas. A pesar de que el sistema defensivo no interceptó completamente el proyectil, se afirma que están preparados para responder a esta clase de armamento, que viola el Derecho Internacional.

El representante de los hutíes, Hezam al Asad, declaró que continuarán su campaña contra Israel en apoyo a Palestina, desestimando los ataques israelíes como intentos fallidos de intimidación. El gobierno hutí denunció que los ataques han provocado un apagón general tras dañar infraestructura vital y acusó a Israel y a Estados Unidos de las consecuencias devastadoras de estos ataques.

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