Al menos once personas han perdido la vida y varias más han resultado heridas por el intenso frío y las fuertes lluvias asociadas a una tormenta de origen polar que azota la Franja de Gaza, causando el colapso de viviendas y serios desperfectos en decenas de tiendas de campaña donde se refugian desplazados por la ofensiva militar de Israel tras los ataques del 7 de octubre de 2023.
La mayoría de las víctimas mortales, cinco en total, se registran en el barrio de Bir al Naja, en la ciudad de Beit Lahia, tras el derrumbe de una vivienda, mientras que al menos otras dos personas han muerto por la caída de un muro en el barrio de Al Rimal.
A estos decesos se añaden los provocados directamente por las bajas temperaturas, sobre todo en el campo de Al Shati, donde también se han producido desplomes de estructuras y han fallecido dos personas. Además, un niño ha muerto debido al frío extremo en la ciudad de Gaza, según informaciones de la agencia palestina de noticias WAFA.
El jueves, un bebé de ocho meses murió por las bajas temperaturas en Jan Yunis, según informaciones del diario “Filastin”, que apuntaban a que la tienda de su familia había sufrido daños a causa de las lluvias.
Las precipitaciones han provocado el colapso de otros inmuebles en la misma localidad y numerosas personas han tenido que ser evacuadas de tiendas de campaña anegadas por la tormenta.
La gravedad del escenario ha llevado al Ministerio de Sanidad gazatí, bajo control del Movimiento de Resistencia Islámica, a alertar sobre el peligro de propagación de enfermedades, especialmente dolencias respiratorias entre menores, ancianos y pacientes con patologías previas.
Desde la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) han lamentado que las condiciones de vida en Gaza “han empeorado debido a las fuertes lluvias y a las difíciles circunstancias derivadas del genocidio israelí que continúa durante los últimos dos años”.
“Las tormentas invernales inundan las calles y sumergen tiendas de campaña temporales en zonas superpobladas e insalubres. Las calles inundadas y los campamentos húmedos agravan las ya de por sí precarias condiciones de vida, por lo que advertimos que los entornos fríos, húmedos e insalubres aumentan considerablemente el riesgo de enfermedades e infecciones”, ha indicado la agencia en un comunicado.
En esta línea, el organismo ha reclamado más ayuda internacional para la población gazatí, con el fin de “evitar su sufrimiento”. “Contar con ayuda permitirá ofrecer un refugio adecuado y servicios médicos de vital importancia. Este apoyo ayudará a las familias a afrontar el invierno de forma segura y digna”, ha zanjado.











