El ministro de Defensa de Colombia, Pedro Sánchez, comunicó el domingo la captura de 45 militares en el departamento del Cauca, al suroeste del país, en una región bajo el control del Frente Carlos Patiño, parte de las disidencias desprendidas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ajustando así los números iniciales que indicaban que 72 soldados estaban retenidos.
‘Denunciamos y condenamos el secuestro de 45 militares en El Tambo, Cauca, en la vereda Los Tigres. Unas 600 personas estarían participando en este delito y en la obstrucción de la función pública, delitos promovidos también por las disidencias del cártel del narcotráfico de alias ‘(Iván) Mordisco», indicó a través de su perfil en la red social X.
El responsable de la defensa nacional ha tildado estas acciones de ‘grave delito’, referenciando tanto el secuestro como las ‘amenazas y presiones’ hacia la población civil. Ha descrito estos actos como ‘una muy grave violación al Derecho Internacional Humanitario, es un delito de lesa humanidad que no prescribe y será perseguido por toda la justicia internacional’.
Además, Sánchez ha mencionado progresos ‘en la identificación de las personas que han participado en esta acción delictiva, con el fin de (…) llevarlas ante la justicia’ y ha afirmado que se mantienen las fuerzas de seguridad en la región ‘para (…) desmantelar los grupos criminales, respetando siempre los Derechos Humanos’.
Los militares, entre los que se encuentran oficiales y suboficiales, fueron capturados el domingo a las 14.00 horas (hora local) en la vereda de Los Tigres, cerca del municipio de El Tambo, durante la operación Perseo II, que buscaba retomar el control de esta área de ‘Mordisco’, según informaciones de Caracol Radio.
El mismo día, las autoridades colombianas arrestaron a Julián Eduardo González Dussan, supuesto líder del Bloque Martín Villa, disidente de las desaparecidas FARC bajo el mando de ‘Mordisco’, cuando este último se dirigía al Cauca para tomar el liderazgo del frente Carlos Patiño.
