El Ministerio de Defensa ruso ha comunicado este miércoles que las fuerzas de Ucrania están experimentando un “rápido deterioro” en sus líneas del frente en Kupiansk (Járkov) y Pokrovsk (Donetsk), mientras que el ejército ruso sigue cerrando el cerco y extendiendo su dominio en la región.
El comunicado señala que las tropas ucranianas están “atrapadas” en estas áreas, enfrentando “graves y continuas pérdidas debido a los ataques en medio del avance ruso. Su situación se deteriora rápidamente y no les deja otra opción que la rendición voluntaria”, explicó el comunicado.
Según el Ministerio, las afirmaciones del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, acerca de la situación en la zona reflejan una “pérdida de contacto con la realidad” o un “desconocimiento de la situación operativa en el terreno”. “Puede que comprenda la verdadera posición de las Fuerzas Armadas ucranianas en Kupiansk (…) e intente ocultar la verdad a la población ucraniana y a sus patrocinadores occidentales para seguir beneficiándose de los fondos de los contribuyentes europeos destinados a la guerra con Rusia”, recoge el texto.
Por otro lado, las Fuerzas Armadas de Ucrania han reportado más de un centenar de bajas en las filas rusas durante los enfrentamientos en Pokrovsk, uno de los pocos bastiones ucranianos en un Donetsk mayoritariamente ocupado por Rusia.
El Kremlin ha destacado la “terrible situación” de las tropas ucranianas en estos frentes y ha reiterado su disposición a permitir que periodistas extranjeros, incluidos los ucranianos, informen desde el lugar, como propuso el presidente ruso, Vladimir Putin. “Hay mucho interés. Sabemos que a un gran número de periodistas occidentales les gustaría ir allí”, declaró el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, quien cuestionó “¿qué esconden en Kiev?” al negar el acceso a los medios a Kupiansk y Pokrovsk. Peskov aclaró que actualmente este desplazamiento es imposible debido al rechazo total de Ucrania a esta posibilidad.
Durante la noche del martes al miércoles, el ejército ruso interceptó 40 drones lanzados desde Ucrania, con la mayoría derribados en la provincia de Voronezh, así como en Rostov, Kursk y Crimea. También se interceptaron drones en las regiones de Briansk, Bélgorod y Oriol. Mientras tanto, Ucrania afirmó haber derribado 61 drones rusos de un total de 80 durante la misma noche.
















