Un niño de seis años figura entre los seis individuos que perdieron la vida, mientras que más de 50 personas sufrieron lesiones a causa de un intenso bombardeo con drones y misiles efectuado por las fuerzas militares rusas en las primeras horas del jueves en diversos sectores de la capital de Ucrania, Kiev.
Timur Tchachenko, líder militar en Kiev, a través de un comunicado en su canal de Telegram, confirmó la muerte de seis personas, especificando que cuatro eran del distrito de Sviatoshinski y dos del distrito de Solomianski. Según Tchachenko, hasta el momento se han registrado 52 lesionados, de los cuales varios han requerido hospitalización. ‘Tenemos 52 heridos, incluidos nueve niños’, detalló, advirtiendo que ‘desafortunadamente, estas cifras probablemente aumentarán’. ‘Es probable que este no sea el balance final’, expresó con consternación.
Por su parte, el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, informó que los equipos de emergencia siguen operando en la zona para auxiliar a los damnificados. ‘Se ha dispuesto un cuartel general para ayudar a todas las víctimas. La ciudad también está pagando indemnizaciones a los residentes de Kiev cuyas viviendas han resultado dañadas o destruidas por el ataque enemigo’, comunicó en un vídeo publicado en Telegram.
El ataque comenzó poco después de la medianoche del jueves y ha impactado los distritos de Holosivski, Sviatoshinski, Solomianski –siendo este último el más afectado hasta ahora– y Shevchenkivski, alcanzando edificaciones residenciales y causando incendios de vehículos y hogares.
Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, elogió la labor de los servicios de emergencia, que ‘han estado trabajando en los lugares donde se produjeron los ataques con misiles y drones rusos’. ‘La infraestructura del edificio ha sufrido graves daños. En uno de los distritos residenciales, una sección completa de un bloque de apartamentos ha sido destruida’, declaró.
Zelenski también extendió su ‘más sentido pésame a todas sus familias y seres queridos de las víctimas’. ‘También hay informes de decenas de heridos, quienes están recibiendo la asistencia necesaria’, añadió.
‘Hoy, el mundo volvió a presenciar la respuesta de Rusia a nuestro deseo de paz, compartido con Estados Unidos y Europa. Nuevas matanzas. (…) Obligar a Moscú a la paz, obligarlo a sentarse a una mesa de negociaciones debe ser una realidad: todas las herramientas necesarias para ello están en manos de nuestros socios. Confiamos en que todo lo que Estados Unidos y Europa están expresando para lograr este objetivo se cumpla’, concluyó.