Un sismo de magnitud 8,8 en la escala Richter se ha registrado este miércoles en la península de Kamchatka, en el extremo oriental de Rusia, desencadenando alertas de tsunami en amplias zonas del Pacífico, incluyendo territorio japonés, donde ya se ha evacuado a dos millones de personas.
El terremoto, que inicialmente se estimó en magnitud 7,7, ocurrió aproximadamente a las 8.25 de la mañana (hora de Rusia), llevando al Gobierno a declarar estado de emergencia en el norte de las islas Kuriles. «Se ha declarado una amenaza de tsunami y se está esclareciendo qué fuerza tienen las olas», explicó Vladimir Solodov, gobernador de Kamchatka.
«Insto a todos a no acercarse a la costa y seguir los anuncios por megafonía», advirtió en un comunicado en el que solicitó a la población «mantenga la calma para que no cunda el pánico».
En un informe adicional, las autoridades rusas notificaron sobre una alerta de tsunami en la bahía de Avacha, al sudeste de la península, y reportaron la destrucción de la fachada de una guardería, aunque afortunadamente no había niños en el lugar en ese momento. «Los trabajadores consiguieron salir del edificio a tiempo», informaron.
Oleg Melnikov, responsable de Salud de Kamchatka, mencionó que varias personas han sufrido heridas por el terremoto, aunque ninguna de gravedad, sin especificar el número exacto de afectados.
Más al sur, en las islas Kuriles, disputadas entre Rusia y Japón, el gobernador Valeri Igorevich Limarenko informó de los efectos del terremoto en Sévero-Kurilsk, una isla cercana a Kamchatka que forma parte del archipiélago de las Kuriles. «Se ha emitido una alerta por tsunami y se está evacuando a los residentes de la zona potencialmente peligrosa a terrenos más elevados», anunció, antes de que los servicios de emergencia evacuaran a 2,700 personas, incluyendo 600 menores, hacia lugares seguros de estas islas.
«Según los datos preliminares, no hay daños graves ni víctimas», aseguró, indicando también que «los servicios de emergencia están trabajando en modo reforzado y la situación está bajo control».
Poco después, el Centro de Vigilancia de Tsunamis de Kamchatka informó al Ministerio de Emergencias ruso sobre una ola que ha causado inundaciones en la ciudad portuaria de Sévero-Kurilsk, según reportes en el canal de Telegram del ministerio.
ALERTAS EN OTROS PAÍSES DE LA REGIÓN
El Gobierno japonés ha ordenado la evacuación de dos millones de personas en zonas costeras para prevenir víctimas mortales y heridos una vez que las olas lleguen a tierra. Esto afecta principalmente a regiones como Hokkaido, Aomori, Iwate, Fukushima, Chiba, Ibaraki y Wakayama, donde se espera que las olas alcancen hasta tres metros de altura.
Las autoridades de Estados Unidos también han reportado el terremoto y emitido alertas de tsunami en Hawái y varias áreas de Alaska, además de la isla de Guam. Mientras, todos los estados de la costa oeste estadounidense permanecen alerta ante la posible llegada de las olas a su litoral.
El gobernador de Hawái, Josh Green, ha comunicado que las autoridades activarán sirenas horas antes del impacto previsto del tsunami y ha recomendado a los ciudadanos «no se arriesguen a estar cerca de la línea de costa cuando la ola se acerque».
Varios países de América Latina han emitido alertas generalizadas. El presidente de Chile, Gabriel Boric, ha indicado en redes sociales que las regiones más afectadas serán Atacama, Coquimbo y Valparaíso.
Además, las autoridades de Ecuador, Colombia y Perú han emitido advertencias similares, y México ha instado a la población a evitar las zonas costeras por el momento, movilizando efectivos a estos lugares.
Las autoridades chinas han enfatizado que se espera que un tsunami afecte varias zonas del este del país, aunque se anticipan olas de menos de un metro de altura.