Tailandia ha informado este miércoles de la devolución a Camboya de 18 soldados detenidos, en aplicación del alto el fuego acordado y puesto en marcha el pasado sábado. Según ha recordado Bangkok, el pacto contemplaba que los 18 militares camboyanos serían entregados de nuevo a su país una vez se mantuviera durante 72 horas el cese de las hostilidades.
“Hoy (31 de diciembre de 2025), a las 10.00 horas (hora local), Tailandia ha repatriado a los 18 soldados camboyanos detenidos a Camboya, de conformidad con el párrafo 11 de la Declaración Conjunta entre Tailandia y Camboya, firmada en la Tercera Reunión Especial del Comité General de Fronteras el 27 de diciembre de 2025”, ha declarado el Ministerio de Exteriores de Tailandia en un comunicado.
Las autoridades tailandesas han subrayado que los militares fueron tratados en todo momento “de conformidad con el Derecho Internacional humanitario, (...) los Convenios de Ginebra” y siguiendo las directrices del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), al que se permitió “visitar periódicamente” a los soldados durante su detención.
Asimismo, Exteriores ha señalado que se llevó a cabo “un examen médico” a los militares camboyanos antes de su entrega y que, dentro de este proceso, “han sido debidamente informados de sus derechos para garantizar un regreso voluntario, seguro y digno”. El comunicado precisa que en la repatriación estuvieron presentes representantes del CICR y el equipo de observadores de la ASEAN, implicados en la mediación del alto el fuego.
Para Bangkok, la devolución de los soldados constituye “una muestra de buena voluntad y fomento de la confianza” y el Gobierno tailandés confía en que Camboya responda con “acciones concretas para promover una paz duradera entre ambos países”.
Por su parte, Camboya ha confirmado mediante un comunicado difundido por su Ministerio de Defensa en Telegram la llegada de sus militares “sanos y salvos a la patria”, ratificando que la operación se ha desarrollado en línea con lo pactado en el alto el fuego.
“El Gobierno Real y el pueblo de Camboya expresan su más profunda gratitud a todas las partes involucradas en los procesos de coordinación que condujeron al exitoso regreso de hoy”, señala el texto, en el que Nom Pen manifiesta que “mantiene la esperanza de que esta liberación contribuya significativamente a fortalecer la confianza mutua”, además de favorecer “un entorno propicio para la paz, la estabilidad y la plena normalización de las relaciones (...) en un futuro próximo”.
EL CICR CELEBRA LA ENTREGA COMO UN PASO A LA PAZ DURADERA
La repatriación de los 18 militares se ha llevado a cabo bajo la supervisión del CICR, que ha actuado como observador humanitario neutral. La presidenta de la organización, Mirjana Spoljaric, ha valorado la implicación del comité y la propia liberación como “un paso importante para traducir los compromisos establecidos en la Declaración conjunta en acciones”.
“El respeto del derecho internacional humanitario, que incluye la repatriación de prisioneros de guerra al finalizar las hostilidades activas, es esencial para crear confianza entre las partes y apoyar el camino hacia una paz duradera”, ha señalado la presidenta del Comité Internacional de la Cruza Roja.
El CICR visitó en cuatro ocasiones a los 18 prisioneros de guerra desde su captura en Tailandia en julio de 2025, con el objetivo de verificar su estado, revisar las condiciones de detención y facilitar el intercambio de mensajes entre ellos y sus familias.
La organización recuerda que el Tercer Convenio de Ginebra establece que los prisioneros de guerra deben ser liberados y repatriados sin demora una vez concluyan las hostilidades activas. Añade que los prisioneros de guerra mantienen su condición y la protección que les otorga el Tercer Convenio de Ginebra hasta su liberación definitiva y su regreso a su país.