En la localidad de Crumpsall, ubicada en las afueras de Mánchester, un grave suceso ha conmocionado a la comunidad este miércoles por la mañana. Al menos dos personas han perdido la vida y otras tres están gravemente heridas tras ser víctimas de un atropello y un apuñalamiento cerca de una sinagoga, según informaciones de la Policía local. Los agentes han respondido disparando a un sospechoso, que presuntamente también ha fallecido.
El incidente ocurrió alrededor de las 9:30, en un momento en que “un gran número de personas” se encontraba dentro del recinto religioso. Sin embargo, la confirmación de la muerte del atacante no ha sido posible inmediatamente debido a la presencia de “objetos sospechosos” en la zona, lo que ha requerido la intervención de un equipo de artificieros para su análisis y desactivación.
El primer ministro británico, Keir Starmer, ha expresado su profunda consternación ante los hechos, especialmente al coincidir con la celebración del Yom Kippur, considerado el día más sagrado del calendario judío. “El hecho de que haya coincidido con la festividad del Yom Kippur, el día más sagrado para los judíos, lo hace aún más horrible”, declaró. Starmer ha interrumpido su agenda en Copenhague y regresado anticipadamente para liderar una reunión del comité COBR, que se ocupa de gestionar emergencias de gran magnitud.
Desde los primeros comunicados, la Policía mencionó la activación de la ‘operación PLATO’, un protocolo diseñado para responder a incidentes de gran escala.