Ampliación | Trump anticipa paz y éxito duraderos tras su encuentro con Xi Jinping

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha expresado su optimismo este sábado tras su reciente reunión con el presidente chino, Xi Jinping, que tuvo lugar el jueves en Corea del Sur, y ha manifestado su esperanza de que dicho encuentro conduzca a “paz y éxito eternos”.

“Mi reunión con el presidente Xi de China ha sido genial para nuestros dos países”, declaró Trump en una publicación en su red social Truth Social. “Esta reunión llevará a paz y éxito eternos. ¡Que Dios bendiga a China y a Estados Unidos!”, añadió el mandatario estadounidense sobre la cita.

Por su parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, ha señalado que tanto él como Trump consideran que las relaciones entre ambos países están en su mejor momento. Hegseth, quien también ha respaldado las declaraciones del presidente, ha indicado que están previstos más encuentros de esta naturaleza en un futuro cercano.

“Acabo de hablar con el presidente Trump y coincidimos en que la relación entre Estados Unidos y China nunca ha sido mejor”, afirmó Hegseth en una publicación en la red social X. Tras el “histórico encuentro” entre Trump y Xi, Hegseth tuvo “una reunión igualmente positiva” con su homólogo chino, Dong Jun, en Malasia.

“El almirante y yo coincidimos en que la paz, la estabilidad y las buenas relaciones son el mejor camino para nuestros dos grandes y fuertes países”, explicó Hegseth, quien subrayó que el camino hacia “una paz y un éxito duraderos” debe basarse en “paz mediante la fuerza, el respeto mutuo y las relaciones positivas”.

Asimismo, el secretario estadounidense y su homólogo chino han acordado la importancia de “establecer canales de comunicación militar” entre ambas naciones para “evitar conflictos y reducir la tensión en caso de emergencias”, revelando que hay “más reuniones programadas próximamente sobre este tema”.

El encuentro entre Xi y Trump, que se celebró el pasado 30 de octubre en Busan, Corea del Sur, sirvió para concretar un acuerdo que reduce en un 10 por ciento los aranceles impuestos a Pekín, además de pactar sobre el comercio de tierras raras.