Dos individuos han perdido la vida el lunes debido a ataques aéreos realizados por Israel en el sur de Líbano, a pesar de que hace casi un año se estableció un cese al fuego con Hezbolá, tras trece meses de hostilidades continuas desde los ataques del 7 de octubre de 2023.
Según informó el Ministerio de Sanidad de Líbano, una de las víctimas falleció en un ataque dirigido a un vehículo en Charkiyé, cerca de Nabatiye, mientras que la segunda víctima murió en otro bombardeo en Aita al Shaab, en Bint Yebeil, reportó la agencia de noticias estatal libanesa, NNA. Además, los ataques dejaron siete heridos, y no se descarta que el número de muertos pueda incrementarse.
Posteriormente, el ejército de Israel confirmó haber eliminado a dos ‘terroristas’ de Hezbolá. Uno de ellos era Mohammad Ali Hadid, líder de la Fuerza Raduán, quien fue abatido en Nabatiye. ‘Este terrorista estaba implicado en múltiples complots contra Israel. Recientemente había reiniciado sus esfuerzos por reconstruir la infraestructura terrorista de Hezbolá’, declaró el ejército israelí.
Además, otro miembro de Hezbolá fue eliminado en Aita al Shaab. ‘El terrorista fue sorprendido mientras recababa información sobre las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel) en la zona’, añadió el ejército.
Israel ha realizado numerosos bombardeos contra Líbano a pesar del alto el fuego de noviembre de 2024, justificando sus acciones como una defensa ante las actividades de Hezbolá y afirmando que esto no infringe el acuerdo. Sin embargo, tanto Beirut como Hezbolá han criticado estas acciones, las cuales también han sido condenadas por las Naciones Unidas.
El acuerdo de cese al fuego estipulaba la retirada de fuerzas tanto de Israel como de Hezbolá del sur de Líbano, pero Israel ha mantenido cinco posiciones en el territorio, lo cual ha sido objeto de críticas por parte de las autoridades libanesas y el grupo chií, quienes exigen el fin de esta presencia militar.
