El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, junto a Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, han manifestado este domingo que es inadmisible que Ucrania ceda territorios a Rusia como parte de un posible acuerdo de paz. Este pronunciamiento se dio durante una breve visita de Zelenski a Bruselas, previa a un encuentro decisivo con Donald Trump en la Casa Blanca.
Zelenski se dirigirá a Washington D.C. acompañado por Von der Leyen y líderes de Alemania, Francia, Reino Unido, Italia y Finlandia, además del secretario general de la OTAN, para que Trump detalle las conclusiones de su reciente cumbre con Vladimir Putin en Alaska.
Según fuentes cercanas, Putin ha rechazado un alto el fuego antes de iniciar negociaciones y ha sugerido retener la región del Donbás, incluyendo las provincias de Donetsk y Lugansk, como condición inicial para detener su ofensiva.
En una rueda de prensa, Von der Leyen reiteró que respecto a las cuestiones territoriales de Ucrania, la postura de la UE y Ucrania es clara: «Las fronteras internacionales no pueden cambiar mediante el uso de la fuerza. Esta clase de decisión la tiene que tomar Ucrania, y solo Ucrania, pero nunca por la fuerza».
Por su parte, Zelenski no abordó estos detalles directamente, pero expresó su expectativa de que Trump le proporcione información detallada en la Casa Blanca, mencionando que «Putin lleva siendo incapaz de conquistar Donetsk desde hace doce años» y destacó que «la Constitución de Ucrania declara imposible tanto la entrega de territorios como su intercambio».
Zelenski también subrayó que cualquier discusión sobre el tema territorial solo podría tener lugar en una reunión trilateral con Estados Unidos y Rusia, aunque hasta ahora no hay indicaciones de que Rusia acepte este formato.
INSISTENCIA EN EL ALTO EL FUEGO
Zelenski enfatizó la necesidad de un alto el fuego antes de iniciar las negociaciones. «Putin tiene muchas demandas, y no las conocemos todas. Si son tantas como he oído, será necesario repasarlas todas con tiempo, y eso es imposible bajo la presión de las armas, así que es necesario declarar un alto el fuego antes de trabajar, con la mayor celeridad posible, en un acuerdo final», explicó Zelenski.
En cuanto a las garantías de seguridad que Ucrania requiere para evitar futuros conflictos con Rusia, Zelenski vinculó esto al proceso de adhesión de Ucrania a la Unión Europea. «La adhesión es parte de la cuestión de seguridad», insistió antes de recomendar a Bruselas que armonice este proceso con las conversaciones de adhesión de Moldavia.
«No puede haber división entre ambos países. En mi opinión sería una decisión muy mala, porque una división en este aspecto implica que existe una división europea sobre Ucrania», agregó Zelenski.
MILITARIZACIÓN
Von der Leyen y Zelenski se opusieron firmemente a cualquier acuerdo que comprometa la capacidad defensiva de Ucrania. Von der Leyen describió a Ucrania como un «puercoespín de hierro» y afirmó que no debe haber restricciones para las fuerzas armadas ucranianas, ni en cooperación con terceros países ni en asistencia de estos.
Finalmente, Von der Leyen confirmó que la Unión Europea continuará apoyando a Ucrania en el ámbito militar y mantendrá la presión económica sobre Rusia a través de un nuevo paquete de sanciones, el 19º, que se espera para septiembre.
«Ya hemos puesto los activos inmovilizados de Rusia a trabajar en beneficio de Ucrania, y seguiremos presionando la economía de guerra de Rusia para llevar al presidente Putin a la mesa de negociaciones», concluyó la presidenta de la Comisión Europea.