Desde Washington, se ha comunicado oficialmente este martes que no está programada ninguna reunión entre Donald Trump, presidente de Estados Unidos, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, en el futuro próximo. Esta información surge tras un ajuste de expectativas por parte del Kremlin, donde se mencionó que «se necesita una preparación seria» para tal evento.
Un representante de la Casa Blanca reveló a Bloomberg que, pese a las conversaciones recientes entre los ministros de Exteriores de ambos países, Sergei Lavrov y Marco Rubio, que describieron el diálogo como «constructivo», no hay planes concretos para un encuentro presidencial pronto. Ambos países emitieron declaraciones moderadas sobre estas discusiones, contrastando con las afirmaciones previas de Trump, quien indicó hace una semana que se reuniría con Putin «en una dos semanas» tras una llamada telefónica.
El acuerdo para un posible encuentro en Budapest, que buscaría «poner fin» al conflicto bélico, fue discutido justo antes de la visita del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, a la Casa Blanca, donde no consiguió los misiles Tomahawk que esperaba para influir en el conflicto. Aunque esta sería la segunda reunión entre Trump y Putin desde el retorno de Trump al poder, no se han establecido compromisos firmes para resolver la guerra, como ya ocurrió en la cumbre de agosto en Anchorage, Alaska.