Las autoridades de Benín han arrestado en las últimas horas al destacado opositor y ex viceministro de Defensa Candide Azzanai, al tiempo que han dictado dos órdenes de detención contra otros dos conocidos críticos del Ejecutivo, en un contexto de máxima tensión política tras el fallido golpe de Estado registrado el pasado fin de semana en el país africano.
Azzanai, que lidera la formación Restaurar la Esperanza, fue interceptado durante un mitin de su partido, según han confirmado fuentes judiciales al diario nacional “La Nation” y a la emisora Radio France Internationale.
De acuerdo con la fuente consultada por el medio francés, Azzanai ha sido arrestado por “ conspiración contra la autoridad del Estado e incitación a la rebelión”, sin que por ahora hayan trascendido más detalles sobre el expediente abierto en su contra.
En paralelo, se ha conocido que el tribunal especializado en delitos contra la seguridad del Estado, el CRIET, ha emitido una orden internacional de busca y captura contra el influencer Kémi Seba, conocido por su cercanía a las juntas militares y por su defensa de la influencia rusa en África, así como contra el también opositor Sabi Sira Korogoné, a quienes se les atribuye un papel en la presunta desestabilización del orden constitucional.
Los hechos relacionados con la asonada se desencadenaron en torno a las 02.00 horas de la madrugada del domingo, cuando los golpistas, con base en el cuartel de Togbin, situado en las proximidades de la principal urbe del país, Cotonú, iniciaron su operación con el objetivo de capturar a altos mandos del Ejército.
El grupo llegó incluso a hacerse con el control de la televisión pública para anunciar la destitución del presidente Patrice Talon, pero la rápida actuación de las fuerzas de seguridad, apoyadas por la aviación nigeriana y por los servicios de Inteligencia franceses, logró neutralizar el intento de golpe en cuestión de horas.