La Fiscalía de Libia, avalada internacionalmente, ha confirmado la captura de Osama al Masri Nayim, ex director de Policía, sobre quien recae una orden de arresto emitida por el Tribunal Penal Internacional (TPI) por presuntos crímenes de guerra, tras ser extraditado por Italia donde había sido liberado tras varios meses detenido.
Según un comunicado oficial en Facebook, su arresto se basa en pruebas de “violaciones de los Derechos Humanos contra detenidos en la principal prisión de Trípoli, donde se reportaron torturas y tratos inhumanos”. Los investigadores han interrogado a Nayim acerca de los maltratos a diez prisioneros, resultando uno de ellos fallecido debido a las torturas, lo cual llevó a su detención.
En enero, fue detenido en Italia por crímenes de guerra desde 2015, pero fue liberado por un tribunal romano y enviado de regreso a Trípoli en un avión militar italiano, desencadenando investigaciones en Italia contra altos funcionarios, incluida la primera ministra, Giorgia Meloni. El TPI ha solicitado a Italia explicaciones y ha recordado la obligación de cooperar en las investigaciones y procesos judiciales conforme al Estatuto de Roma.
La Misión de Apoyo de Naciones Unidas en Libia (UNSMIL) ha instado a que se proceda con la detención y se asegure la total responsabilidad en los crímenes imputados o su entrega al TPI para su procesamiento. Libia sigue dividida en dos gobiernos tras la crisis electoral de diciembre de 2021, sin acuerdos de reunificación o elecciones a la vista.