El miércoles por la tarde, una oficina de la Fiscalía General del Estado en Baja California, situada al noroeste de México, fue blanco de un ataque con explosivos lanzados presuntamente desde un dron, confirmó la propia entidad. Afortunadamente, no se registraron heridos a raíz de este suceso.
Aproximadamente a las 19:00 horas (hora local), en la unidad antisecuestros de Playas de Tijuana, se escucharon detonaciones que resultaron ser de explosivos y piezas metálicas como clavos o balines, que cayeron en los patios, según explicó la fiscal Elena Andrade Ramírez en conferencia de prensa.
El atentado causó daños en el edificio y afectó tres vehículos privados además de uno oficial. Andrade Ramírez interpretó el ataque como un intento de grupos criminales de minar la autoridad del Ministerio Público.
La Fiscalía aseguró continuar con su labor investigativa con rigor y compromiso, subrayando su determinación de llevar ante la justicia a los autores de crímenes de alto impacto. “Esta institución va con todo, caiga quien caiga”, enfatizaron en un comunicado.
Tras el incidente, el Consulado de Estados Unidos en Tijuana recomendó a los ciudadanos estadounidenses evitar la zona, anticipando una intensa actividad de las fuerzas de seguridad mexicanas.