Siete individuos han perdido la vida este viernes tras un brutal atentado dirigido a un ‘comité de paz’ en Bannu, una localidad situada en Jaiber Pastunjua, Pakistán, cerca de la línea fronteriza con Afganistán. Esta organización estaba confirmada para colaborar con las autoridades locales en la lucha antiterrorista.
Según lo reportado por el periódico local ‘Dawn’, citando fuentes policiales, entre los fallecidos se encuentra un ex miembro del grupo Tehrik-i-Taliban (TTP), que había renunciado a la lucha armada para cooperar con el gobierno, junto con seis miembros de su familia. Hasta el momento, ningún grupo ha asumido la responsabilidad del ataque.
El primer ministro de Pakistán, Shehbaz Sharif, ha expresado su condena “firmemente” hacia este ataque y manifestó su “profundo dolor y pesar” por las vidas perdidas. Adicionalmente, ha atribuido el ataque al grupo TTP, también conocidos como los talibanes paquistaníes.
Este incidente sucede un día después de que el Ejército de Pakistán informara sobre la eliminación de 30 presuntos miembros de TTP en diversas operaciones en la misma provincia. La región ha sido un foco constante de inseguridad, en parte, debido a las actividades de TTP y las acusaciones cruzadas entre India y los talibanes afganos sobre el apoyo a este grupo, acusaciones que han sido negadas por ambos, Nueva Delhi y Kabul.