El gobierno de Bielorrusia ha verificado el lunes que se han reactivado diversos contactos con Estados Unidos buscando mejorar las relaciones diplomáticas que se deterioraron durante la administración anterior, justo una semana después de que Keith Kellogg, representante especial, visitara Minsk.
Pavel Shidlovsky, encargado de negocios de Bielorrusia en Washington, declaró a la agencia Belta: «Nuestro diálogo con la parte estadounidense continúa; se han establecido los contactos necesarios y estos se están desarrollando».
Shidlovsky también comentó que la embajada de Bielorrusia está en conversaciones con «organizaciones públicas estadounidenses, la comunidad humanitaria y de expertos», y remarcó el «interés» de su país por profundizar estos contactos, aunque por el momento no proporcionará más detalles sobre el contenido de estas discusiones.
Además, mencionó que actualmente no se considera la posibilidad de intercambiar embajadores entre las dos naciones.
La visita no anunciada de Kellogg a Minsk, que se encontró con el presidente Alexander Lukashenko, parece estar vinculada con los recientes intercambios de prisioneros entre Rusia y Estados Unidos, con la mediación bielorrusa que incluyó la liberación de algunos ciudadanos estadounidenses.
Lukashenko, con tono humorístico, cuestionó el alboroto mediático sobre la visita: «No entiendo tanto ruido por su llegada. ¿Acaso no podemos mantener un diálogo normal y hablar de nuestros asuntos, de las relaciones entre Bielorrusia y los Estados Unidos de América?».