Israel y Bolivia han restablecido este martes sus vínculos diplomáticos, que habían quedado suspendidos por decisión del Gobierno de Luis Arce a finales de octubre de 2023 como reacción a la respuesta militar israelí al ataque del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) de ese mes, en una ceremonia celebrada en Washington D.C.
La reanudación de relaciones se ha formalizado mediante un acuerdo de cooperación firmado por el ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, y su homólogo boliviano, Fernando Aramayo, quienes ya habían anticipado este movimiento tras la victoria de Rodrigo Paz en las elecciones presidenciales celebradas en el país latinoamericano el pasado octubre.
En esta línea, la Cancillería boliviana ha aplaudido este entendimiento “en un momento en el que Bolivia apuesta por diversificar sus alianzas estratégicas” con la nueva Presidencia, y ha remarcado que supone “un retorno a la confianza, a la cooperación inteligente y a los lazos que siempre existieron, pero que ahora se revitalizan con una mirada moderna”.
Según ha detallado La Paz, la normalización de los lazos diplomáticos hará posible “que científicos, emprendedores, médicos, agricultores y estudiantes de ambos países accedan a nuevas posibilidades de intercambio”, antes de destacar que “con este entendimiento, Bolivia e Israel retoman un camino común que apuesta por un futuro más estable, seguro y próspero para ambos pueblos”.
El expresidente Luis Arce había roto los vínculos con el Ejecutivo de Benjamin Netanyahu en rechazo a la ofensiva militar lanzada sobre la Franja de Gaza tras los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023, que causaron unos 1.200 muertos y 250 secuestrados, convirtiendo a Bolivia en uno de los primeros Estados de América Latina en adoptar esta medida, que Israel calificó de “rendición ante el terrorismo”.











