Este domingo, las principales ciudades de Brasil fueron escenario de una masiva movilización de seguidores del expresidente Jair Bolsonaro. Aprovechando la conmemoración del Día de la Independencia, los participantes pidieron una amnistía para Bolsonaro, quien enfrenta acusaciones por un presunto intento de golpe de Estado tras perder las elecciones de 2022 frente a Luiz Inácio Lula da Silva.
Informes del Monitor del Debate Político y del Centro Brasileño de Análisis e Planificación (Cebrap) indican que las convocatorias de los seguidores de Bolsonaro superaron en número a las organizadas por los partidarios de Lula.
Las manifestaciones de la derecha se centraron en Alexandre de Moraes, presidente del Tribunal Supremo, y en la promoción de una ley de amnistía que necesitaría la aprobación del Congreso brasileño, mientras que las protestas de izquierda se enfocaron en defender la soberanía nacional y criticar a Bolsonaro.
Por ejemplo, en Río de Janeiro, el centro registró la presencia de entre 3,000 y 4,000 simpatizantes de izquierda, mientras que en la playa de Copacabana se congregaron aproximadamente 30,000 personas en apoyo a Bolsonaro.
En Sao Paulo, los bolsonaristas se reunieron con Tarcisio de Freitas, posible candidato de la derecha en futuras elecciones, dada la inhabilitación de Bolsonaro. De Freitas, desde la avenida Paulista, defendió la necesidad de una ‘amnistía general’ y criticó al Supremo por juzgar a Bolsonaro por ‘un crimen que no existió’. ‘No vamos a aceptar la dictadura de un poder sobre otro. Basta’, declaró, refiriéndose a De Moraes como ‘tirano’.
Lula, por su parte, asistió al desfile militar en Brasilia sin la presencia de los jueces del Tribunal Supremo Federal, destacando el patriotismo. La ceremonia oficial contó con la participación de 45,000 personas, superando las 30,000 del año anterior, según informó la Presidencia.