Este miércoles, el Gobierno de Brasil ha comunicado su decisión de unirse a la acción legal impulsada por Sudáfrica en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) contra Israel, acusado de cometer genocidio en Gaza, manifestando su «profunda indignación por los recurrentes episodios de violencia contra la población civil en el Estado de Palestina».
«El Gobierno brasileño anuncia que se encuentra en la etapa final de presentación de la intervención formal en el proceso en curso ante la Corte Internacional de Justicia, iniciado por Sudáfrica con base en la Convención para la prevención y la sanción del delito de genocidio», informó el Ministerio de Exteriores de Brasil mediante una nota de prensa.
El Ministerio justificó su participación alegando que «se basa en el deber de los Estados de cumplir con sus obligaciones en virtud del Derecho Internacional y el Derecho Internacional Humanitario», y sostuvo que es probable «que los derechos de los palestinos a la protección contra actos de genocidio estén siendo perjudicados irreversiblemente, como concluyó la Corte Internacional de Justicia en las medidas cautelares anunciadas en 2024».
Además, la diplomacia brasileña ha criticado que «la comunidad internacional sigue siendo testigo habitual de graves violaciones de los derechos humanos y de la ayuda humanitaria», incluyendo «la violencia indiscriminada y el vandalismo cometidos por colonos extremistas en Cisjordania» y «as constantes violaciones del derecho internacional, como la anexión de territorios por la fuerza y la expansión de asentamientos ilegales».
Finalmente, el comunicado enfatiza que «Brasil cree que ya no hay espacio para la ambigüedad moral ni la omisión política. La impunidad socava la legalidad internacional y compromete la credibilidad del sistema multilateral».