Bruselas ha manifestado este jueves su inquietud ante el creciente número de procesos judiciales en Turquía contra funcionarios electos, destacando la solicitud de 2.000 años de cárcel para el exalcalde de Estambul, Ekrem Imamoglu.
“Somos conscientes de la acusación presentada contra el alcalde de Estambul. Observamos con preocupación el creciente número de acciones legales contra cargos electos de la oposición, activistas políticos, representantes de la sociedad civil y del sector empresarial, periodistas y otras personas desde comienzos de este año”, ha señalado un portavoz de la Comisión Europea en declaraciones a Europa Press.
Desde Bruselas, se subraya que, como país aspirante a ser miembro de la Unión Europea y como integrante del Consejo de Europa, Turquía debe adherirse a los “más altos estándares y prácticas democráticas”.
El informe anual de Ampliación menciona un ‘retroceso’ en la justicia y los derechos fundamentales dentro del país turco. “Los procedimientos legales y administrativos no deben utilizarse para intimidar ni ejercer presión sobre las voces de la oposición”, enfatizó el portavoz, añadiendo que esas acciones minan la confianza de los ciudadanos en la independencia judicial y la democracia turca.
Recientemente, la Fiscalía de Estambul ha solicitado una condena de más de 2.000 años de prisión para Imamoglu, acusado de corrupción y ya condenado por haber insultado al fiscal jefe de la ciudad, Akin Gurlek.
El mencionado fiscal Gurlek, quien fue objetado por Imamoglu por supuestamente dirigir investigaciones con motivaciones políticas contra opositores, ha declarado que la acusación consta de casi 4.000 páginas e implica a cerca de 400 sospechosos.
