El gobierno de China ha implementado sanciones a seis empresas de Estados Unidos acusadas de prestar “apoyo y cooperación militar” a Taiwán, considerado por Pekín como parte de su territorio. Esta acción se enmarca en un contexto de incremento en las tensiones comerciales entre ambas superpotencias.
Según un anuncio del Ministerio de Comercio chino, estas compañías están ahora restringidas para comprar materiales de uso dual civil y militar de proveedores chinos, incluso si existen acuerdos previos en vigor.
Aun cuando se anticipa un encuentro entre Donald Trump y Xi Jinping, los líderes de Estados Unidos y China, respectivamente, el ejecutivo chino ha señalado que estas empresas han participado en actividades que “socavan la soberanía nacional china y la seguridad, así como los intereses de desarrollo del país”.
Las firmas afectadas incluyen a Saronic Technologies, Aerkomm Company, Oceaneering International, Planate Management Group, Global Dimensions LLC y Huntington Ingalls Industries.
La historia entre China y Taiwán se remonta a 1949, cuando tras la derrota del Kuomintang en la guerra civil, se reubicaron en la isla, reanudando las relaciones solo en términos empresariales e informales hacia finales de los años 80.