El Ejército chino llevará a cabo esta semana ejercicios militares en las inmediaciones de Taiwán en “una severa advertencia contra fuerzas separatistas”, según ha comunicado el Comando de Operaciones Oriental.
Su portavoz, el coronel Shi Yi, ha presentado la “Misión Justicia 2025”, unas maniobras que suponen “una seria advertencia a fuerzas separatistas que promueven la 'independencia de Taiwán'”. Ha defendido que se trata de “una acción legítima y necesaria para salvaguardar la soberanía nacional y mantener la unidad nacional”.
El Ministerio de Defensa ha recalcado que “el ejercicio tiene como objetivo poner a prueba la capacidad de combate conjunto de las tropas del comando” y ha extendido la advertencia a “fuerzas externas de interferencia”.
Shi ha avanzado que las operaciones se desarrollarán “en el estrecho de Taiwán y áreas al norte, suroeste, sureste y este de la isla”. Los entrenamientos se focalizarán en el “combate marítimo-aéreo”, la “toma conjunta de la superioridad”, el “bloqueo de puertos y áreas clave” y la “disuasión integral fuera del archipiélago”.
Respuesta de Taiwán: denuncia de intimidación militar
Como reacción, la portavoz de la oficina presidencial taiwanesa, Karen Kuo, ha manifestado en Facebook que “esta acción de China no solo socava flagrantemente la seguridad y la estabilidad del Estrecho de Taiwán y la región del Indopacífico, sino que también desafía abiertamente el Derecho Internacional y el orden internacional”.
Ha añadido que “Taiwán expresa su enérgica condena al desprecio de las autoridades chinas por las normas internacionales y su uso de la intimidación militar para amenazar a los países vecinos”, resaltando que las Fuerzas Armadas de la isla están “plenamente preparadas para garantizar la seguridad de la nación y su pueblo”, que “puede estar tranquilo”.
La portavoz ha pedido además a Pekín “actuar con racionalidad y moderación, cesar de inmediato sus provocaciones irresponsables y abstenerse de malinterpretar la situación y convertirse en alborotadores que socaven la paz regional”.
Por último, ha remarcado que “el Gobierno taiwanés también seguirá trabajando estrechamente con todas las partes de la región para garantizar conjuntamente un orden internacional basado en normas y salvaguardar la paz, la estabilidad y la seguridad en el Indopacífico”.