El número de víctimas mortales por el incendio que se produjo el pasado miércoles en varios rascacielos de Hong Kong ha ascendido a 151, confirmaron las autoridades el lunes.
Los servicios de emergencia han reportado que aún hay 39 víctimas que no han sido identificadas. En las últimas operaciones de búsqueda en el complejo, ubicado en el distrito de Tai Po, no se han hallado más cuerpos.
Además, se estima que alrededor de treinta personas continúan desaparecidas. Según el periódico ‘The Standard’, la identificación de algunas víctimas se ha complicado enormemente debido a las severas quemaduras que presentan.
Las autoridades persisten en sus esfuerzos por concluir las labores de búsqueda y las investigaciones dentro de las próximas tres semanas. Mientras tanto, se cree que los materiales usados en la renovación del edificio, como la espuma de protección en las ventanas, podrían haber contribuido a la rápida propagación del fuego, dificultando la evacuación.
Este siniestro se ha catalogado como el más mortal en Hong Kong desde 1948, cuando un incendio en Shek Tong Tsui provocó la muerte de al menos 176 personas. Este grave incidente ha precipitado una serie de medidas por parte de las autoridades para prevenir disturbios y protestas.
