Tras ser víctima de un incidente de acoso sexual en público, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha propuesto una reforma constitucional para penalizar esta conducta en todo el territorio nacional. El suceso ocurrió mientras transitaba por una calle de Ciudad de México, donde un hombre la tocó sin su consentimiento y ha sido arrestado posteriormente.
Sheinbaum tiene como meta que el acoso sexual sea reconocido como delito a nivel nacional, señalando que este tipo de comportamientos son parte de «un problema sistémico que afecta a todas las mujeres mexicanas». «Busco sentar un precedente», manifestó durante una conferencia.
La presidenta expresó la importancia de tomar acciones legales, especialmente después de visualizar los vídeos del incidente. «Decidí levantar denuncia porque esto es algo que viví como mujer, pero lo vivimos las mujeres en nuestro país», explicó. Aludiendo a las repercusiones de no actuar, comentó: «Si no presento yo denuncia, ¿en qué condición se quedan todas las mujeres mexicanas? Si esto le hacen a la presidenta, ¿qué va a pasar con todas las jóvenes?».
Además, se iniciará una campaña nacional para fomentar el respeto y transmitir un «mensaje contundente» sobre la inviolabilidad del espacio personal femenino. Clara Brugada, jefa de Gobierno de Ciudad de México, reiteró su apoyo a Sheinbaum y enfatizó: «Si tocan a la presidenta, nos tocan a todas» y «Cero tolerancia a la violencia hacia las mujeres».
El Ministerio de las Mujeres de México ha condenado el suceso y anima a las afectadas por abusos a denunciar. «¡Las mujeres, adolescentes y niñas no se tocan!», recalcaron. Según el INEGI, más del 70% de las mujeres mexicanas mayores de 15 años han experimentado algún tipo de abuso, y casi la mitad ha sido objeto de violencia sexual, con Ciudad de México como una de las localidades con más incidencias después del Estado de México.















