Cientos de residentes de la ciudad de Yafo, vecina de Tel Aviv, salieron a la calle este sábado para manifestarse tras la agresión sufrida por una mujer árabe-israelí, atacada con un espray de pimienta por un grupo de judíos en esta localidad.
Según la prensa israelí, la víctima fue abordada cuando circulaba en coche por el barrio de Ayami, donde, además de ser rociada con gas pimienta, también habría recibido insultos.
Durante la marcha de protesta hacia el punto exacto en el que se produjo la agresión, los asistentes entonaron consignas como “Decidle a los perros del Shin Bet que no tenemos miedo del conflicto”, de acuerdo con la información difundida por el portal de noticias Arab48.
El líder del partido árabe-israelí Balad, Sami Abú Shehadé, responsabilizó al Ejecutivo israelí de favorecer este tipo de ataques. “No es un incidente aislado, sino un nuevo episodio de la política sistemática contra la gente de Yafo y nuestra nación palestina en su conjunto”, afirmó, subrayando además que “El silencio oficial es complicidad con este crimen”.
La Policía ha informado de que una mujer resultó herida tras ser atacada con un pulverizador de pimienta en el marco de una discusión y ha precisado que fue trasladada a un hospital para recibir tratamiento médico. Las fuerzas de seguridad han indicado que, por ahora, no se ha practicado ninguna detención relacionada con estos hechos.