La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), que lidera las organizaciones indígenas del país, ha acusado al gobierno de bloquear las cuentas bancarias de sus líderes y entidades afiliadas. Este hecho ocurre en el contexto de una huelga nacional sin fecha de término, iniciada como respuesta a la eliminación de los subsidios al diésel que resultó en un incremento superior al 50% en el precio del combustible.
Según informes, los cierres de las cuentas se han llevado a cabo por directrices gubernamentales, interpretadas por la CONAIE como tácticas de intimidación y criminalización de sus acciones. “El bloqueo económico a dirigentes indígenas no es un acto aislado, sino parte de una estrategia para criminalizar la protesta social y debilitar las demandas de los pueblos y nacionalidades del país, que buscan soluciones frente a la crisis económica que atraviesan millones de ecuatorianos”, expresó la organización en un comunicado.
Además, la CONAIE ha manifestado su firme rechazo a cualquier forma de amedrentamiento, reafirmando “nuestro compromiso con la defensa de la vida, el territorio y los derechos colectivos (…) sin dejarse intimidar por acciones ilegales o políticas de persecución”. Bajo el liderazgo de Marlon Vargas, la CONAIE ha instado a las comunidades indígenas y campesinas, así como a los ciudadanos en general, a unirse en contra de las políticas económicas implementadas por el presidente Daniel Noboa, denunciando simultáneamente actos de represión y solicitando la atención de entidades internacionales como la ONU y la CIDH.
Entre las reivindicaciones de la CONAIE se incluye la demanda de una reducción del IVA del 15% al 12% y la restauración del parlamento plurinacional que incluya a pueblos y organizaciones sociales. Frente a las protestas, el presidente Noboa ha declarado el estado de excepción en siete provincias y ha prohibido las concentraciones, aunque las movilizaciones siguen activas.











