Este lunes, el Tribunal Internacional de Crímenes de Bangladesh ha emitido una sentencia de muerte contra la ex primera ministra Sheij Hasina por su implicación en crímenes contra la humanidad durante la represión de las manifestaciones de julio y agosto de 2024, las cuales resultaron en la muerte de aproximadamente 1.400 individuos, precipitando el fin de su gobierno de quince años.
Asimismo, la corte ha condenado a muerte a Asaduzaman Jan Kamal, quien fue ministro del Interior en aquel periodo. Por otro lado, Choudri Abdulá al Mamun, ex inspector general de Policía y colaborador en el proceso judicial, ha recibido una condena de cinco años de prisión.
Además, el tribunal ha ordenado la confiscación de los bienes de Hasina, actualmente fugitiva en India y enfrenta tres cargos adicionales en esta misma corte, creada en 2009 para procesar crímenes de genocidio y lesa humanidad, incluyendo dos casos de desaparición forzada y otro relacionado con la represión de protestas en 2013.
En cuanto a Asaduzaman, también prófugo, el fallo incluye la retirada de sus propiedades. La Fiscalía ha propuesto que estos bienes sean utilizados para compensar a las víctimas, de acuerdo con lo reportado por ‘The Daily Star’.
Previamente, en julio, Hasina fue sentenciada a seis meses de cárcel por desacato después de ser acusada por los crímenes contra la humanidad cometidos al ordenar la represión de las protestas, las cuales se organizaron en oposición a un controvertido sistema de cuotas que favorecía a los parientes de los veteranos de guerra en la asignación de cargos públicos.
