El Congreso de los Estados Unidos ha dado luz verde a una controvertida ley que habilita a juzgar como adultos a menores de 14 años acusados de «crímenes violentos» en Washington, D.C., además de otra normativa que modifica la edad máxima para recibir sentencias más benignas de 24 a 18 años.
La nueva legislación autoriza que adolescentes de 14 años enfrenten la justicia adulta por delitos serios como asesinato o robo a mano armada, sin requerir una audiencia previa, extendiendo una práctica que anteriormente se aplicaba solo a partir de los 16 años.
Esta medida surge tras las recientes solicitudes del presidente Donald Trump y de la fiscal federal de Washington, Jeanine Pirro, quienes han exigido penas más severas para los menores, reportó el ‘Washington Post’. Según Pirro, las políticas actuales que ofrecen segundas oportunidades a los jóvenes delincuentes son «absurdas».
Por su parte, el demócrata Robert García criticó la medida, destacando los problemas raciales subyacentes, ya que la mayoría de los jóvenes afectados son afroamericanos. «Si cometes un delito, debes rendir cuentas. Pero un joven de 14 años no es un adulto», señaló García.
Además, el Congreso aprobó la Ley de Reformas Penales de Washington, que restringe la capacidad de los jueces para otorgar sentencias alternativas a menores de hasta 24 años, limitando ahora esta posibilidad a los menores de 18 años.
El análisis del Consejo Coordinador de Justicia Penal de Washington en 2022 reveló que aquellos jóvenes cuyas condenas se revisaron gracias a esta ley tenían menos probabilidades de reincidir en comparación con otros jóvenes en situaciones similares que no se beneficiaron de dichas políticas.
Finalmente, García remarcó que la nueva legislación no busca mejorar la seguridad, sino «quitarles la capacidad de decisión a los jueces y a los habitantes del Distrito de Columbia y, en su lugar, entregar el poder de los jueces a los políticos de esta sala que no viven aquí, no votan aquí y no responden ante los residentes del Distrito de Columbia».