Al menos cuatro personas, entre ellas un menor de edad, han perdido la vida este sábado en el paso fronterizo de Spin Boldak, próximo a la ciudad afgana de Kandahar, tras registrarse nuevos combates entre las fuerzas paquistaníes y los talibán a lo largo de la línea limítrofe común.
Además, otras cuatro personas han resultado heridas en estos enfrentamientos, dos de ellas en estado crítico. Según ha informado la agencia de noticias Jaama Press, varios proyectiles de mortero habrían caído sobre aldeas cercanas a Spin Boldak, lo que ha obligado a decenas de residentes afganos a abandonar sus viviendas y ponerse a salvo.
El repunte de la violencia llega después de que el portavoz de las autoridades instauradas por los talibán en Afganistán, Zabehulá Muyahid, acusara a Islamabad de llevar a cabo ataques en territorio afgano. A su vez, Mosharraf Zaidi, portavoz del primer ministro paquistaní, Shehbaz Sharif, responsabilizó a las fuerzas afganas de efectuar disparos en la zona fronteriza de Chaman.
“Nuestras Fuerzas Armadas han dado una respuesta inmediata, oportuna e intensa. Pakistán permanece en plena alerta y comprometido a garantizar su integridad territorial y la seguridad de sus ciudadanos”, ha señalado Zaidi en un mensaje publicado en X.
En los dos últimos meses, las autoridades de Pakistán y Afganistán han celebrado varias rondas de diálogo para tratar de rebajar la tensión derivada de las acusaciones de Islamabad por el incremento de los atentados del grupo Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP), conocido como los talibán paquistaníes.
Como represalia por estos ataques, Pakistán llevó a cabo un bombardeo sobre Kabul que habría tenido como objetivo al líder del TTP, aunque Islamabad no ha confirmado este extremo y el dirigente, Nur Wali Mehsud, habría logrado sobrevivir. En paralelo, los talibán lanzaron una ofensiva en la franja fronteriza, desencadenando combates de gran intensidad que se detuvieron días después tras la declaración de un alto el fuego temporal.
La región limítrofe entre ambos países es desde hace años un foco de inestabilidad, en buena medida por las operaciones de TTP, en un contexto de acusaciones por parte de Islamabad hacia India y hacia los talibán afganos por su supuesto respaldo a esta organización, algo que tanto Nueva Delhi como Kabul han negado reiteradamente.
En los últimos meses, Islamabad ha efectuado varios ataques aéreos sobre territorio afgano alegando que actúa contra dicho grupo. Hace poco, doce personas murieron en un atentado suicida reivindicado por TTP en la capital paquistaní. Asimismo, las fuerzas de seguridad de Pakistán frustraron en noviembre un ataque de gran envergadura contra un campus militar situado en la región de Waziristán Sur.
