Este viernes, el gobierno polaco ha comunicado que su embajada en Kiev, Ucrania, ha experimentado daños debido a un reciente ataque llevado a cabo por las fuerzas militares rusas, que también ha resultado en más de veinte heridos en la mencionada ciudad.
«En el masivo ataque racista contra Kiev resultó dañado el edificio del departamento consular de nuestra Embajada», declaró Radoslaw Sikorski, ministro de Exteriores de Polonia, mediante su perfil en la plataforma X.
Además, Sikorski ha mencionado que se ha puesto en contacto con el embajador polaco en Kiev para discutir sobre lo ocurrido. «Todos están sanos y salvos», enfatizó, y agregó que «Ucrania necesita urgentemente capacidades de defensa aérea» para contrarrestar estos ataques.
Por su parte, Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, ha denunciado este asalto como «uno de los ataques a mayor escala» en el contexto del conflicto que comenzó en febrero de 2022, involucrando el uso de 550 drones y misiles dirigidos a Kiev y otras áreas. «Una vez más, Rusia demuestra que no tiene intención de poner fin a la guerra ni al terrorismo», lamentó Zelenski.
«Todo esto demuestra claramente que, sin una presión verdaderamente a gran escala, Rusia no cambiará su comportamiento necio y destructivo», argumentó. «Por cada ataque de este tipo contra personas y vidas humanas, debe sufrir las sanciones correspondientes y otros golpes a su economía, sus ingresos y su infraestructura. Esto es lo único que puede hacerse rápidamente para mejorar la situación, y depende de nuestros socios, principalmente de Estados Unidos», concluyó.