Cerca de una decena de Estados árabes y de mayoría musulmana han reiterado este viernes su apoyo a la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), después de que la Asamblea General de Naciones Unidas aprobara por una mayoría abrumadora prolongar durante tres años adicionales su mandato, pese a los intentos de criminalizar su trabajo, especialmente “ante la crisis sin precedentes” en la Franja de Gaza, donde la ofensiva israelí ha causado más de 70.300 muertos.
Jordania, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Indonesia, Pakistán, Turquía, Arabia Saudí, Qatar y Egipto han reiterado el “papel indispensable” de la UNRWA en la salvaguarda de los derechos y del bienestar de los refugiados palestinos, recalcando que “durante décadas ha cumplido un mandato único que le confió la comunidad internacional: brindar protección, educación, atención médica, servicios sociales y ayuda de emergencia a millones de refugiados palestinos”.
Los ministros de Exteriores de estos países han aprovechado la declaración conjunta para remarcar “el papel esencial que desempeña la UNRWA en la prestación de ayuda humanitaria a través de su red de centros de distribución, garantizando que los alimentos, artículos de socorro y de primera necesidad lleguen a quienes los necesitan de forma justa y eficiente”, en particular “ante la crisis humanitaria sin precedentes en la Franja de Gaza”.
En la misma línea, han destacado que las escuelas y centros de salud de la agencia “siguen siendo un recurso vital” para la población refugiada en Gaza, ya que proporcionan educación y atención sanitaria básica “en condiciones extremadamente difíciles”, lo que “contribuye a la implementación del plan” del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, “sobre el terreno y permite al pueblo palestino permanecer en su territorio y reconstruir su patria”.
“El papel de la UNRWA es irremplazable. Ninguna otra entidad posee la infraestructura, la experiencia y la presencia sobre el terreno necesarias para atender las necesidades de los refugiados palestinos ni para garantizar la continuidad de los servicios a la escala necesaria. Cualquier debilitamiento de la capacidad del organismo tendría graves repercusiones humanitarias, sociales y políticas en toda la región”, han recalcado en un comunicado conjunto.
Por este motivo, han llamado a la comunidad internacional a “garantizar una financiación sostenible y adecuada para la UNRWA y a proporcionarle un espacio político y operativo necesario para continuar su vital labor en sus (…) ámbitos de operaciones”. “Apoyar a la UNRWA es una piedra angular para mantener la estabilidad, preservar la dignidad humana y defender los derechos de los refugiados palestinos hasta que se logre una solución justa y duradera a su difícil situación”, han añadido.
En este contexto, han valorado que la aprobación de la resolución en la Asamblea General de la ONU para prorrogar el mandato de la UNRWA por otros tres años “refleja la confianza internacional en el papel vital que desempeña la agencia y en la continuidad de sus operaciones”. Asimismo, han condenado la reciente entrada de las fuerzas de seguridad israelíes en la sede de la UNRWA en Jerusalén Este, donde sustituyeron la bandera de la ONU por una israelí.
“Este ataque representa una flagrante violación del Derecho Internacional y de la inviolabilidad de las instalaciones de la ONU, lo que constituye una escalada inaceptable y viola la opinión consultiva de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), del 22 de octubre de 2025, que establece claramente que Israel, como potencia ocupante, tiene la obligación de no obstaculizar las operaciones de la UNRWA, sino, al contrario, facilitarlas”, han manifestado.











