En días recientes, Flávio, Carlos y Eduardo Bolsonaro, hijos del expresidente brasileño Jair Bolsonaro, han mostrado su descontento hacia ciertos aliados por intentar reemplazar a su padre justo antes de que inicie su juicio por el presunto golpe de Estado de 2023, mientras aún no deciden un candidato para las elecciones presidenciales de 2026.
Flávio Bolsonaro, quien es senador por Río de Janeiro, expresó esta semana que ahora no es el momento de minimizar la figura de su padre, sino de demostrarle ‘solidaridad’. Criticó sutilmente las claras intenciones del principal candidato de la oposición para enfrentar al presidente Lula da Silva el próximo año, el gobernador de Sao Paulo, Tarcisio de Freitas.
‘Las elecciones son dentro de año y medio. No conozco ningún candidato a la Presidencia que haya tenido éxito anticipándose tanto. Normalmente nadie aguanta tanto tiempo y acaba quemándose’, evaluó Flávio.
Esa semana, De Freitas asistió a un evento con empresarios donde, además de presentar una opción para vencer a Lula, escuchó a Valdemar Costa Neto, presidente del Partido Liberal (PL) –al cual Bolsonaro pertenecía–, proponer su afiliación para postularse como candidato en esas elecciones.
Esto provocó un especial descontento en Eduardo, quien desde febrero está en Estados Unidos apoyando la liberación de su padre. Según fuentes del partido, podría incluso abandonar el PL para lanzar su propia candidatura presidencial si De Freitas acepta el ofrecimiento, según informó ‘O Globo’.
Eduardo ha señalado que estos sectores de la derecha están ‘chantajeando’ con sus propuestas de reemplazar al patriarca Bolsonaro en un momento en que enfrenta un ‘juicio injusto’. ‘Estas prisas’, afirma, solo intentan forzar al jefe de familia a tomar una decisión irreversible.
‘Lo advierto ya para que no vengan después con la letanía de que desuno a la derecha o soy radical: con el chantaje no conseguirán nada’, manifestó en X junto a una fotografía de su padre y hermanos, incluido Carlos, a quien tampoco le ha gustado que los líderes de la derecha actúen como si nada ante el juicio de su padre.
En redes sociales, Carlos, concejal por Río de Janeiro, criticó a la ‘supuesta derecha’ por su ‘absoluta falta de humanidad’ hacia quien ‘les permitió alzar el vuelo’, refiriéndose a su padre, mientras ‘fingen normalidad’ en un contexto en que ‘el Tribunal Supremo se prepara para el mayor teatro jamás visto’.
Ante la controversia generada, Costa Neto tuvo que aclarar que el candidato del PL a la Presidencia sigue siendo Bolsonaro, o quien él designe. Aunque De Freitas es considerado por el expresidente, algunos dentro del partido dudan que, en caso de ganar, opte por el indulto.
La insistencia de Bolsonaro por posicionarse como líder de la derecha en las próximas elecciones contrasta con su situación legal. Además de la posible condena por su rol en el intento de golpe, ya está inhabilitado hasta 2030 por abuso de poder político y uso indebido de medios estatales.
En junio de 2023, el Tribunal Superior Electoral determinó que Bolsonaro violó ambos cargos al usar el Palacio de la Alvorada para una reunión con embajadores extranjeros, intentando convencerles de la supuesta inseguridad del sistema electoral brasileño.
La Justicia sostiene que ese y otros eventos antes de las elecciones de octubre de 2022, cuya derrota tardó en reconocer mientras sus seguidores pedían una intervención militar, fueron clave para el asalto al Congreso y al Supremo en enero de 2023.
Mientras persiste la incertidumbre, las encuestas indican un empate técnico en un posible enfrentamiento electoral entre De Freitas y Lula, quien aún no ha confirmado oficialmente su candidatura, aunque ha mostrado disposición siempre que su salud lo permita. Para entonces, el presidente brasileño tendría 80 años cumplidos.
