Tras un reciente acto de sabotaje al sistema ferroviario, Polonia ha decidido movilizar a 10.000 militares para custodiar sus infraestructuras vitales. Este episodio ha sido directamente atribuido a acciones de Moscú por las autoridades de Varsovia.
‘Operación Horizonte’ en marcha
El ministro de Defensa, Wladyslaw Kosiniak-Kamysz, ha anunciado que esta movilización se enmarca en la ‘Operación Horizonte’. Los soldados colaborarán estrechamente con agencias subordinadas al Ministerio del Interior para reforzar la protección de infraestructuras esenciales y evitar nuevos sabotajes. ‘Con el apoyo de los equipos de seguridad y herramientas de inteligencia, fortaleceremos aún más la defensa del territorio nacional’, declaró Kosiniak-Kamysz en su perfil de X.
La operación, que comenzará este viernes y seguirá hasta nuevo aviso, se enfocará en áreas clave como líneas de comunicación y aeropuertos. En una conferencia de prensa, el ministro del Interior, Marcin Kierwinski, junto con Kosiniak-Kamysz, subrayó la importancia de la colaboración interagencial en tiempos de amenazas híbridas para asegurar la seguridad. Además, mencionaron que la policía, el ejército y la Guardia Fronteriza trabajarán en conjunto.
En respuesta al sabotaje, Polonia ha reanudado los servicios ferroviarios afectados y ha cerrado el último consulado ruso en Gdansk, después de advertencias previas a Rusia sobre la reducción de su presencia diplomática. Frente a estas acciones, autoridades rusas han negado su involucración y anunciaron una reducción recíproca en su presencia consular.
