La primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, ha alertado sobre la posibilidad de enfrentar más ‘ataques híbridos’ tras los recientes avistamientos de drones cerca de infraestructuras clave. En una declaración oficial, anunció un incremento de la presencia de fuerzas de seguridad y militares, equipadas con tecnología antidrones, en zonas críticas del país.
‘Dinamarca ha sufrido ataques híbridos en los últimos días. Se han visto drones en varios lugares, cerca de infraestructuras críticas, tanto militares como civiles. Estos son ataques que debemos esperar, y pueden venir más’, indicó Frederiksen, señalando las debilidades expuestas en la defensa danesa.
‘Veremos más sabotajes. Más ataques de hackers. Incluso más drones. Cables submarinos destruidos. Ataques directos a las democracias europeas, como estamos viendo actualmente en el pequeño país de Moldavia’, declaró la mandataria. La estrategia del gobierno incluye la elevación del nivel de alerta y una mayor coordinación con aliados internacionales, especialmente a través de la OTAN, para fortalecer la capacidad de Dinamarca para detectar y neutralizar amenazas aéreas.
‘En segundo lugar, nuestras autoridades tienen el mandato de derribar los drones enemigos’, comunicó Frederiksen, advirtiendo que cada situación específica llevará una evaluación operativa minuciosa.
La primera ministra también mencionó que los ‘ataques híbridos’ pueden adoptar diversas formas, incluyendo drones, ciberataques y desinformación. ‘Teorías conspirativas que lees en internet’, comentó, subrayando la importancia de mantener la calma y no precipitarse en respuestas políticas.
Aunque no acusó directamente a Rusia, Frederiksen destacó que hay un país que constituye una amenaza principal para la seguridad de Europa. ‘Ningún país europeo puede defenderse solo contra Rusia, ni siquiera Ucrania, que lucha valientemente desde hace más de tres años. Y es por eso que tenemos nuestra alianza OTAN. Por eso estamos ampliando la industria de defensa europea. Y es por eso que nos estamos embarcando en un proceso histórico aquí en Dinamarca’, concluyó.