El director del Servicio de Prisiones de Israel, Kobi Yaakobi, ha declarado que renunciará a su posición si la Fiscalía lo imputa. La investigación en curso busca determinar si Yaakobi informó a un alto funcionario de prisiones en Cisjordania sobre una operación secreta relacionada con supuestos beneficios otorgados a colonos israelíes extremistas encarcelados.
Quiero poner de manifiesto de la forma más clara posible que tengo fe en el sistema (legal) y estoy absolutamente seguro de que el caso que me afecta será cerrado en cuanto todo se aclare totalmente dentro del proceso legal, ha expresado Yaakobi en una misiva pública que recoge ‘The Times of Israel’.
Al mismo tiempo, si se toma una decisión distinta, actuaré conforme mi más profundo compromiso con el servicio de prisiones y la alta misión que he asumido de acuerdo a los valores de ejemplaridad y rendición de cuentas, ha continuado.
Yaakobi es objeto de una investigación por presuntamente haber interferido en una indagación encubierta contra Avishai Muallem, otro alto funcionario acusado de ocultar una investigación sobre actos violentos de judíos nacionalistas. Se espera que Yaakobi se presente para testificar en relación a las acusaciones antes de que se decida si será formalmente imputado o no.
Por otro lado, Itamar Ben Givir, ministro de Seguridad Interior y líder del partido ultraderechista Poder Judío, ha criticado a la fiscal general, Gali Baharav-Miara, por amenazar a cargos públicos que aplican la política de autoridades electas para politizar el sistema de seguridad y proteger al ‘estado profundo’, según sus palabras.
Yaakobi evidentemente seguirá en su puesto y seguirá con su desempeño igual que ha estado haciendo hasta ahora, ha concluido el dirigente ultranacionalista judío.