El mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, ha ejecutado la firma de una nueva orden ejecutiva este lunes, que elimina con efecto inmediato todas las sanciones previamente impuestas a Siria.
La nueva disposición presidencial revoca las cinco órdenes anteriores que aplicaban sanciones al gobierno de Bashar al Assad, quien fue derrocado a finales de 2024 tras un ataque de las milicias rebeldes, encabezadas por Hayat Tahrir al Sham (HTS) y el actual líder del país, Ahmed al Shara.
«Abre la puerta a un proceso largamente esperado de reconstrucción y desarrollo», fueron las palabras del ministro de Asuntos Exteriores de Siria, Assad al Sheibani, celebrando el cese de las sanciones y destacando su importancia para la reintegración de Siria con la comunidad internacional.
En una visita a Arabia Saudí en mayo, Trump ya había anunciado su intención de retirar las sanciones, solicitada tanto por Damasco como por sus principales socios, Turquía y Arabia Saudí, para promover la reconstrucción nacional.
En ese mismo mes, se adoptó una regulación que pausaba temporalmente las sanciones, siendo la orden ejecutiva firmada por Trump la que definitivamente las cancela.
Las restricciones impuestas por Estados Unidos a Siria se iniciaron en 1979, cuando el país fue catalogado como «patrocinador del terrorismo». Se intensificaron en 2004 debido a la ocupación militar de Siria en Líbano y se agravaron en 2011, durante los conflictos que siguieron a las protestas en el contexto de la primavera árabe.