El presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, Hugo Motta, ha revocado la designación de Eduardo Bolsonaro como líder de la minoría. Este movimiento se produce un día después de que la Fiscalía presentara una denuncia contra él por presiones durante el proceso judicial contra su padre, el expresidente Jair Bolsonaro, acusado de orquestar un golpe de Estado.
Hugo Motta ha decidido retirar a Eduardo Bolsonaro de su cargo una semana después de que la oposición lo seleccionara para el mismo, en un esfuerzo por preservar su escaño, que estaba en riesgo debido a su ausencia prolongada de la Cámara Baja desde finales de febrero.
Actualmente, Eduardo Bolsonaro se encuentra en Estados Unidos y ha expresado su deseo de no regresar a Brasil por miedo a ser detenido en relación con los intentos de golpe de Estado del 2022.
Para Motta, la ausencia de Eduardo Bolsonaro de Brasil hace inviable su rol como líder de la minoría, una posición que requiere «sin duda la presencia física del parlamentario» y cuyas responsabilidades son más exigentes que las de un diputado regular, según sus palabras.
Motta ha argumentado que la «ausencia física del país» de Eduardo Bolsonaro le impide cumplir con las «prerrogativas y deberes esenciales del liderato», reduciendo su función a una mera simbolización y violando el reglamento de la Cámara.
Desde julio, cuando finalizó su permiso de ausencia, Eduardo Bolsonaro ha intentado sin éxito prolongar su estancia en Estados Unidos sin afectar su mandato como diputado.
Eduardo Bolsonaro ha sido señalado como uno de los promotores de las amenazas arancelarias y sanciones que la Administración Trump impuso contra el gobierno de Brasil y figuras clave como el juez del Tribunal Supremo, Alexandre de Moraes, como represalia por el proceso judicial contra su padre, Jair Bolsonaro.











