El gobierno de Estados Unidos confirmó el miércoles la repatriación de una mujer y tres niños a Tanzania, procedentes del campo de desplazados de Al Roj, ubicado en el noreste de Siria.
Desde el Departamento de Estado, se extendió un agradecimiento a las autoridades tanzanas por su colaboración en la operación realizada el 11 de agosto, con la «asistencia» de Estados Unidos. Aunque no se ha obtenido una confirmación oficial por parte de Tanzania ni de las autoridades kurdas a cargo de estos campamentos, que son hogar de familiares de miembros del Estado Islámico.
«Estados Unidos agradece a Tanzania por trabajar con nosotros para repatriar a sus ciudadanos, y agradece a nuestros socios locales, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), por su ayuda para facilitar esta repatriación y su compromiso para garantizar la derrota duradera del Estado Islámico», declaró la cartera diplomática estadounidense. El comunicado también destaca la importancia de que los países de origen asuman la responsabilidad por sus nacionales en estos campamentos, como una medida necesaria para manejar la crisis humanitaria y de seguridad, y reducir la posibilidad de un resurgimiento del grupo yihadista en la región.
Según estimaciones de Washington, los campamentos de Al Hol y Roj albergan a cerca de 14.500 personas de más de 70 nacionalidades diferentes, excluyendo a los sirios, con la mayoría de los residentes siendo menores de 12 años.