Este miércoles, desde Estados Unidos se ha hecho un llamamiento a otros miembros de la OTAN para que se adhieran al recién estrenado esquema de apoyo al ejército ucraniano a través de la compra de armas estadounidenses, a pesar de la participación inicial de países como Alemania, Países Bajos, Noruega, Dinamarca, Suecia y Canadá, y la reticencia de naciones como España, Francia o Italia.
“Nuestra expectativa hoy es que más países donen aún más, que compren aún más para proporcionar a Ucrania lo necesario para llevar este conflicto a una conclusión pacífica”, declaró Pete Hegseth, secretario de Defensa de Estados Unidos, en un encuentro en Bruselas sobre el plan conocido como Lista de Requisitos Prioritarios de Ucrania (PURL).
Según Hegseth, Donald Trump ha demostrado con el acuerdo de alto el fuego en Gaza que “la aplicación activa de la paz es a través de la fuerza”. “La paz se consigue cuando se es fuerte, no cuando se utilizan palabras duras o se señala con el dedo. Se consigue cuando se tienen capacidades sólidas y reales que los adversarios respetan”, subrayó, animando a más socios de la OTAN a unirse al mecanismo de donación de armas a Kiev.
Después de los primeros envíos de misiles, munición y sistemas antiaéreos fabricados en EE.UU., que suman un valor de 2.000 millones de euros, Dovile Sakaliene, ministra de Defensa de Lituania, anunció que su país contribuirá con 30 millones de euros para la compra de armamento que respalde a Ucrania en una futura colaboración entre países bálticos y nórdicos.
Por su parte, Hanno Pevkur, ministro estonio, indicó que están a punto de cerrar su paquete de ayuda. “Estamos muy cerca de tener el paquete totalmente comprometido. Así que son buenas noticias”, comentó, aunque enfatizó que todos los aliados tienen la responsabilidad de asistir a Kiev.
ESPAÑA, ITALIA O FRANCIA NO PARTICIPAN DEL PLAN
La iniciativa ha resaltado nuevamente las divisiones dentro de la OTAN, entre los aliados del norte, partícipes en el mecanismo, y países como España, Italia o Francia, que de momento no tienen previsto unirse al plan.
“Estamos haciendo hincapié en la solidaridad que todos en Europa deben mostrar para asumir una parte justa de la carga que supone el apoyo a Ucrania”, señaló Antti Hakkanen, el homólogo finlandés, instando a que todos los aliados “encuentren el dinero” necesario para estas inversiones.
“Es un momento crucial y el mensaje de Estados Unidos es claro: está proporcionando estas armas, pero los europeos tienen que pagar el apoyo a Ucrania”, resumió el ministro nórdico.
Mientras tanto, desde Países Bajos, Ruben Brekelmans alentó a todos los aliados a avanzar en su apoyo a Ucrania. “Lo que siempre digo es que cuanto más esperemos y no actuemos, más aumentará el coste”, advirtió, haciendo hincapié en que la mejor inversión en seguridad es apoyar a Ucrania, tras solicitar que más países emulen el ejemplo con las compras a través de PURL.