El gobierno de Estados Unidos implementará fianzas de 5.000, 10.000 o 15.000 dólares (aproximadamente 12.992 euros) para los visados de turismo y de negocios otorgados a visitantes procedentes de ciertos países, que todavía no han sido revelados, y que presentan altas tasas de estancias ilegales.
Estos depósitos se aplicarán mediante un programa piloto de un año de duración que ha sido detallado en una normativa temporal definitiva anunciada el lunes, según indica ‘Bloomberg’.
El programa también afectará a países donde se ha identificado una supervisión insuficiente en la evaluación de los solicitantes y a aquellos que ofrecen ciudadanía por inversión sin necesidad de residencia.
No se permitirán excepciones para solicitar, aunque los funcionarios podrán liberar de la obligación de pagar la fianza por razones humanitarias urgentes u otras situaciones excepcionales.
Además, los visitantes tendrán que entrar y salir de EE. UU. por aeropuertos específicos, que el Departamento de Estado anunciará próximamente. Si abandonan EE. UU. dentro del plazo establecido, se les reembolsará completamente la fianza.
El Departamento de Estado ha descrito este programa piloto como ‘un pilar fundamental de la política exterior de la administración Trump para proteger a Estados Unidos de la clara amenaza para la seguridad nacional que suponen las estancias prolongadas sin visado y la selección y verificación deficientes’.
El alcance del programa piloto se considera ‘limitado’ y probablemente impactará a países con un volumen de viajes ‘relativamente bajo’, según ha explicado Erik Hansen, vicepresidente senior de relaciones gubernamentales de la Asociación de Viajes de Estados Unidos.
‘Si queremos mantener una posición competitiva en el mercado mundial de los viajes, es fundamental que la política de visados de Estados Unidos refleje tanto las prioridades de seguridad nacional como el importante valor económico de las visitas internacionales’, ha declarado.
Este programa revive una iniciativa de los últimos meses del primer mandato del presidente Donald Trump, que no se implementó por la interrupción de los viajes debido a la pandemia de Covid-19.
En 2020, esta iniciativa incluía 23 países, como Afganistán, Angola, Chad, República Democrática del Congo, Eritrea, Irán, Laos, Liberia, Libia, Mauritania, Sudán, Siria y Yemen.
Un reporte del Departamento de Seguridad Nacional de 2023 ha documentado más de 314.000 casos de viajeros que se excedieron en el tiempo permitido con visados de negocios ‘B-1’ o turísticos ‘B-2’.