Las Fuerzas Armadas de Israel han declarado este jueves que han eliminado a dos integrantes de Hezbolá en una serie de ataques realizados en el sur de Líbano, a pesar de un cese al fuego acordado a finales de noviembre de 2024.
«En menos de una hora, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han atacado y han abatido a dos terroristas de Hezbolá en el sur del Líbano esta mañana», se puede leer en una declaración publicada en su perfil de la red social X, donde también mencionan que estas acciones son una infracción de los acuerdos entre Israel y Líbano.
Según las FDI, uno de los abatidos fue el comandante naval de la Fuerza Radwan de Hezbolá, Hasán Ahmed Sabra, quien perdió la vida durante un ataque en Al Kafur. En otro ataque, esta vez en la localidad costera de Naqura, las fuerzas israelíes eliminaron a «un terrorista de Hezbolá que intentaba restaurar la infraestructura terrorista», aunque no se proporcionaron más detalles sobre la identidad del segundo fallecido.
Israel defiende estos ataques alegando que son operaciones contra las actividades de Hezbolá y sostiene que no violan el alto el fuego establecido en noviembre. Sin embargo, tanto Beirut como Hezbolá han criticado estas acciones, que también han sido condenadas por Naciones Unidas debido a su efecto adverso en la estabilidad regional.
El acuerdo de cese al fuego, alcanzado tras meses de conflictos a raíz de los ataques del 7 de octubre de 2023, estipulaba la retirada de efectivos tanto de Israel como de Hezbolá del sur de Líbano. No obstante, el ejército israelí ha mantenido cinco bases en el territorio de su país vecino, lo que ha generado críticas tanto de las autoridades libanesas como del grupo chií, quienes demandan el cese de esta presencia.