Tarique Rahman, líder 'de facto' del principal partido opositor de Bangladesh e hijo de la ex primera ministra Jaleda Zia, ha regresado este jueves al país después de pasar 17 años exiliado en Londres, capital de Reino Unido, con la vista puesta en las elecciones previstas para febrero de 2026 en la nación asiática.
Cientos de simpatizantes se han concentrado para recibir a Rahman, de 60 años y máximo dirigente del Partido Nacionalista de Bangladesh (BNP), que ha aterrizado en el aeropuerto de Daca acompañado por su esposa, Zubaida Rahmanand, y su hija, Zaima Zarnaz Rahman.
En una nota oficial, el BNP ha resaltado que “la congregación histórica y sin precedentes de personas ha convertido Daca en un mar de gente”, mientras el dirigente opositor ha trasladado su agradecimiento a los asistentes, así como a los activistas y miembros de su formación y de otros partidos políticos de Bangladesh.
Del mismo modo, ha expresado su “agradecimiento sincero” y su “gratitud” al Ejército y a las distintas ramas de las fuerzas de seguridad por preservar el orden durante los actos, y ha extendido ese reconocimiento al primer ministro interino, Muhammad Yunus, por las gestiones realizadas para asegurar su protección y la de sus familiares.
“Agentes de varios poderes dominantes siguen participando en conspiraciones. Debemos mantener la paciencia y ejercer la cautela”, ha manifestado ante la multitud, a la que ha pedido evitar cualquier respuesta a posibles provocaciones. “El pueblo de Bangladesh quiere recuperar su derecho a hablar”, ha añadido.
En su intervención, ha recalcado además: “Ha llegado el momento de que construyamos juntos este país. Este país pertenece a la gente de las colinas y las llanuras, a los musulmanes, hindúes, budistas y cristianos. Queremos construir un Bangladesh seguro en el que todas las mujeres, hombres y niños puedan salir de casa y volver a salvo”.
Tras el multitudinario recibimiento, Rahman se ha dirigido al hospital donde permanece ingresada Zia. A lo largo del trayecto, su vehículo ha avanzado entre nutridas filas de seguidores apostados en las aceras para verle pasar, según ha informado el diario bangladeshí ‘The Daily Star’.
Rahman salió del país en 2008, cuando se exilió tras la llegada al poder de Sheij Hasina, quien dejó el cargo y huyó a India en el verano de 2024 después de una dura represión contra masivas protestas antigubernamentales, que causaron 1.400 muertos y terminaron provocando su caída tras 15 años en el Gobierno.
Durante su estancia en el extranjero, fue condenado en rebeldía por delitos de blanqueo de capitales, corrupción y por un presunto complot para asesinar a Hasina. El BNP ha defendido en todo momento su inocencia y sostiene que estos fallos judiciales respondían a motivaciones políticas con el objetivo de desacreditarle e impedir su participación en las urnas.
Tras la salida de Hasina del poder, los tribunales anularon dichas condenas, lo que despejó el camino para el retorno de Rahman y para que asuma previsiblemente el liderazgo del BNP en los próximos comicios, los primeros tras la huida de la ex primera ministra, en los que el partido aspira a lograr la victoria y situarle como próximo primer ministro de Bangladesh.