Los abogados de Jair Bolsonaro, expresidente de Brasil, enfatizaron en la segunda sesión del juicio en el Tribunal Supremo de Brasil que «no hay una sola prueba» que implique a su cliente en el intento de golpe de Estado después de las elecciones de 2022.
Celso Vilardi, su abogado, declaró que no se ha encontrado ninguna evidencia que conecte a Bolsonaro con el intento de asesinato del presidente actual, Luiz Inácio Lula da Silva, en una operación denominada ‘Puñal Verde y Amarillo’. Igualmente, descartó cualquier vínculo con un documento en una memoria USB que proponía «restablecer el orden y la ley» en Brasil o con los eventos del 8 de enero.
Vilardi también mencionó que, según su opinión, Bolsonaro «no violó el Estado de derecho» y criticó a Mauro Cid, ex colaborador cercano de Bolsonaro, por considerarlo poco confiable después de haber aceptado cooperar con la justicia y cambiar su testimonio en múltiples ocasiones. Propuso incluso anular el acuerdo de culpabilidad por las inconsistencias presentadas.
Además, cuestionó la base del caso, que se apoya en un acuerdo de culpabilidad y un borrador hallado en un celular de un colaborador de la justicia, argumentando que Bolsonaro fue involucrado injustamente en los hechos que investiga la Policía Federal.
En la misma sesión, la defensa de Augusto Heleno, exjefe de Seguridad, presentó argumentos para demostrar que se había alejado de Bolsonaro cerca del fin de su mandato, indicando que nunca conversaron sobre algún golpe de Estado. Matheus Milanez, su abogado, intentó minimizar unas declaraciones previas de Heleno sobre la necesidad de actuar antes de las elecciones, señalando que «no hay discusión, (puesto que) quien tiene más votos gana».
Bajo estrictas medidas de seguridad y sin la presencia de Bolsonaro, la primera sala del Supremo de Brasil comenzó este histórico juicio contra el exmandatario, quien se encuentra bajo detención domiciliaria, y otros siete individuos, todos acusados de intentar subvertir violentamente el Estado de derecho, planear un golpe de Estado y vandalizar propiedades durante el asalto a instituciones el 8 de enero de 2023.