Los representantes legales de Jair Bolsonaro, exmandatario de Brasil, han hecho una petición formal al magistrado Alexandre de Moraes del Tribunal Supremo para establecer una línea de comunicación telefónica. Alegan que este canal es esencial para garantizar sus derechos defensivos mientras se resuelven los recursos pendientes en el caso de la acusación por intento de golpe de Estado.
Desde Sao Paulo, donde tiene su base el equipo de abogados, hasta Brasilia, donde Bolsonaro se encuentra bajo arresto domiciliario, la distancia complica la situación. Además, han solicitado que se revisen y potencialmente se eliminen otras medidas cautelares impuestas en julio, según reporta G1.
En septiembre, Bolsonaro recibió una condena de 27 años y tres meses de cárcel por liderar un esquema para perpetuarse en el poder tras los comicios de octubre de 2022. Esta sentencia se hará efectiva solo después de que se agoten todas las posibilidades de apelación.
Bolsonaro fue puesto bajo arresto domiciliario a principios de agosto, medida que incluía el uso obligatorio de una tobillera electrónica y restricciones para el uso de redes sociales o contacto con coacusados. Esto en respuesta a acciones previas del expresidente que desafiaron las restricciones impuestas, como su participación en eventos públicos y políticos a través de redes sociales.
El endurecimiento de las medidas cautelares por parte de De Moraes vino tras la violación de Bolsonaro a las condiciones impuestas inicialmente en julio, incluyendo su aparición en una manifestación de apoyo y un evento político.