El Gobierno de Eslovaquia ha dado luz verde este viernes a un nuevo paquete de ayuda destinado a la infraestructura energética de Ucrania, la cual ha sufrido severos daños debido a los ataques rusos en el contexto del conflicto bélico. Este movimiento refuerza los lazos entre Kiev y Bratislava, quienes han confirmado que su soporte continuará siendo exclusivamente humanitario.
Yulia Sviridenko, primera ministra de Ucrania, ha expresado su gratitud hacia las autoridades eslovacas. A pesar de las críticas por ser consideradas aliadas de Moscú, junto con Hungría, el apoyo recibido es crucial para garantizar que los niños ucranianos puedan seguir asistiendo a la escuela. “Es fundamental para que los niños ucranianos tengan la oportunidad de continuar su educación presencial”, destacó Sviridenko.
En una rueda de prensa en Kosice con su homólogo eslovaco, Robert Fico, Sviridenko subrayó que la asistencia de Eslovaquia será vital para afrontar un invierno que promete ser particularmente duro, dado el continuo bombardeo a sus estructuras energéticas por parte de Rusia.
Por su parte, Fico ha aplaudido las aspiraciones de Ucrania de integrarse a la Unión Europea. “Será beneficioso para la estabilidad de la región y para nuestras relaciones bilaterales”, aseguró. Además, ha abordado temas delicados como la adhesión a la OTAN y el suministro de gas ruso, que pasaba por Ucrania y que se detuvo definitivamente en enero de 2025 tras la decisión de no renovar el acuerdo de tránsito con Gazprom y Naftogaz.
“La guerra terminará y rezamos para que esto suceda lo antes posible. Nosotros, como amigos, queremos hablar con franqueza, porque nuestras opiniones no siempre coinciden”, concluyó Fico.