El gobierno de Estonia ha emitido una firme advertencia este lunes, declarando que interceptarán y derribarán cualquier aeronave rusa que infrinja su espacio aéreo. Este anuncio se produce tras varios incidentes similares ocurridos recientemente, en un contexto donde otros miembros de la OTAN también han reportado incursiones de aviones de combate y drones rusos.
“Los interceptaremos y los derribaremos”, afirmó con contundencia el ministro de Asuntos Exteriores estonio, Margus Tsahkna, durante una conferencia de prensa con Andri Sibiga, su homólogo ucraniano, en el marco de la visita oficial de este último.
Tsahkna subrayó que la OTAN dispone de un protocolo establecido desde hace veinte años para responder a estas amenazas y “defender su territorio desde el primer segundo, desde el primer ataque”, tal como lo cita la agencia ucraniana RBC.
El ministro hizo referencia a un incidente específico que duró doce minutos hace un mes, aunque Rusia lo niega, señalando que las fuerzas de la OTAN estaban “listos para actuar” ante cualquier “amenaza inmediata” a la soberanía del país báltico.
“Esta no era la primera vez que Rusia ponía a prueba nuestras capacidades”, señaló Tsahkna, recordando episodios similares en los países bálticos vecinos, así como en Rumanía y Polonia, donde aproximadamente una decena de drones rusos sobrevolaron su espacio aéreo.
El ministro destacó que, gracias a estos incidentes, los aliados de la OTAN están incrementando su coordinación y reforzando sus capacidades defensivas.
