Este miércoles, la Fiscalía de Georgia ha acusado a Georgi Gajaria, quien lideró el gobierno entre 2019 y 2021, de abuso de poder y de provocar daños durante la represión de una manifestación en junio de 2019, época en la que se desempeñaba como ministro del Interior.
Gajaria, que recientemente se trasladó a Alemania ante el riesgo de ser procesado, podría enfrentarse a una condena de hasta trece años de prisión por estos actos, que tuvieron lugar frente al Parlamento en Tiflis, la capital, dejando un saldo de al menos 240 heridos, como reporta el portal Civil.
Adicionalmente, en agosto de 2019, Gajaria autorizó la instalación de un puesto de control en Chorchana, cerca de la frontera con Osetia del Sur, sin el consentimiento del entonces primer ministro, Mamuka Bajtadze, los servicios de Seguridad y la misión de observación de la UE.
La imputación a Gajaria se produce una semana después de que ocho líderes opositores fueran procesados por delitos contra el Estado tras las últimas protestas postelectorales. A diferencia de otras fuerzas de la oposición, el partido de Gajaria, ‘Para Georgia’, no ha sido objeto de petición de ilegalización por parte del partido en el poder, Sueño Georgiano, a diferencia de otras tres agrupaciones.











