Cinco miembros del ejército turco perdieron la vida a causa de una explosión de metano mientras llevaban a cabo una misión en una cueva del norte de Irak para recuperar los restos de un compañero caído el año anterior.
El Ministerio de Defensa de Turquía comunicó el suceso, que involucraba a 19 soldados en la operación conocida como Operación Cierre de Garra.
La misión tenía como fin recobrar los restos del teniente primero Nuri Melih Bozkurt, quien fue abatido el 28 de mayo de 2022 por disparos de «terroristas» en una región con actividad del grupo insurgente PKK.
Los 19 soldados ingresaron a la cueva este domingo, ubicada en una elevación de 852 metros, donde se encontraron con el gas metano. Fueron evacuados de inmediato y hospitalizados, pero «cinco de nuestros heroicos militares recibieron el martirio».
«Que la misericordia de Alá sea con nuestros queridos mártires, que perdieron la vida en este trágico accidente que nos sume en el dolor y el pesar. Nuestras condolencias para las familias en duelo, las Fuerzas Armadas turcas y nuestra noble nación y deseamos una pronta recuperación a los militares heridos», agregó el Ministerio.
Entre los fallecidos se encuentran el soldado raso Özkan Özkanli, el teniente primero Ege Akar, el soldado raso Ahmet Kusak, Abdurrahman Akdogan y Mahsun Yesildemir.